Entrevista realizada por LA RAZÓN

¿A qué se dedica Aim Inver y qué servicios ofrece?

Aim Inver es una consultora financiera cuyo cometido principal es el de cubrir las necesidades financieras tanto de personas físicas como jurídicas, intermediando con el cliente y las entidades financieras.

Ofrecemos un servicio de asesoramiento personalizado a cada cliente, donde tratamos de optimizar los recursos de éste para la consecución del objetivo. Posteriormente y siempre que exista acuerdo por ambas partes, llevamos esta operación desde el principio hasta el día de la escrituración pública, estando en contacto continuo con el cliente para satisfacer cualquier duda que pueda llegar a tener.

¿En qué tipo de servicios están especializados?

Actualmente estamos enfocados en la intermediación hipotecaria, ofreciendo a nuestros clientes una serie de productos a priori inaccesibles para ellos pero que, tras acuerdos con entidades financieras, nos podemos permitir ofrecer.

Tanto los tipos de interés como los porcentajes de financiación se ven claramente mejorados al contratar nuestros servicios, llegando incluso a conseguir financiación hipotecaria para gente sin ahorro alguno.

¿Cuál es el público objetivo al que van dirigido sus servicios?

Cualquier persona física o jurídica que precise de financiación será recibida en esta empresa, con la profesionalidad y el buen trato que nos caracteriza.

No es fácil después de “superar” una crisis y tras pagar unos precios de alquiler desorbitados, poder permitirnos el lujo de ahorrar el 20% del precio de compraventa de la vivienda y los gastos inherentes a esta operación. Por eso estamos ofreciendo un producto en el que el cliente puede comprar una vivienda, aportando muy poco dinero a la operación.

¿Quiénes conforman la compañía y cuáles son sus puntos fuertes como profesionales?

El perfil de nuestros profesionales está claramente enfocado al ofrecimiento de un servicio excelente, donde su calidad como profesional es pareja con su calidad personal. La empatía y el carácter ganador son dos de nuestros puntos fuertes.

La empresa la conforman trabajadores con titulación universitaria, dando especial importancia a la formación exigente que se ofrece al entrar en la empresa.

¿Con qué tipo de entidades financieras trabajan?

Trabajamos con todo tipo de entidades financieras cuyos productos no excedan de nuestros intereses, velando siempre por la integridad económica del cliente y evitando tipos de interés que no se adapten al perfil de éste.

En su página web ofrecen un simulador de hipotecas. ¿Cómo funciona y qué ventajas ofrece?

Efectivamente, el simulador de Aim Inver funciona a la perfección. Tras rellenar todos los campos, envía un correo directamente a análisis para ponernos en contacto con el cliente y darle una respuesta sobre la viabilidad de la operación. Respondemos en un plazo límite de 24 horas.

¿Por qué recomendaría a un potencial cliente contar con los servicios de una empresa como Aim Inver?

Porque no hay mejor manera de optimizar los recursos de un cliente que acudiendo a nosotros. Creo fuertemente en la especialización de las empresas y en la división del trabajo para ser más productivos. Esta empresa está fuertemente departamentalizada y consolidada en este sector.

¿En qué punto se encuentra el mercado inmobiliario y la concesión de préstamos hipotecarios tras la crisis?

Parece que la preposición “tras” utilizada en esta pregunta no es la correcta. Desde mi punto de vista estamos muy lejos de lo que es una salida clara de la crisis financiera creada por una falta ingente de responsabilidad.

Factores como el paro, la tasa de ahorro, la renta media en España, distan mucho de los valores ideales de un país presumiblemente recuperado de una crisis que ha hecho estragos en los hogares y empresas.

Actualmente se firmaron en España un total de 429.082 hipotecas, un número que dista mucho de las firmadas en el año 2006, que ascendió a 1.896.515 pero que se asemeja mucho al de las firmadas en plena crisis que, se acercaban a las 400.000 hipotecas anuales.

El parón que ha sufrido el sector de la construcción junto con la disminución de la inmigración nos va a afectar negativamente a medio plazo.

Crecemos poco a poco y con los pies en la tierra, tomando las decisiones de la forma más óptima posible para evitar una recaída de este sector y por ende perjudicar a esta gran nación que tanto nos ha ofrecido y que con tanto afán, unos pocos desgraciados tratan de destruir.

Fuente: Periódico La Razón